Si de parrillada se habla, La Monumental ocupa los pensamientos de los salteños, la empresa familiar fue creada hace 50 años por Mario Sastre, hoy lograron reabrir dos de sus tres sucursales y aprendieron a reorganizar sus recursos e ingresos. Dante, hijo del fundador contó a Dossier Web su experiencia tras el aislamiento estricto por el COVID-19.
“Antes de la pandemia teníamos abiertas tres sucursales en la Balcarce y Ameghino, el histórico de Entre Ríos y Vicente López y el que está en el Club Gimnasia y Tiro, pero tuvimos que poner todo nuestro esfuerzo para afrontar esto que nos tomó a todos por sorpresa”.
Ante la orden de cerrar todas las actividades la familia siguió trabajando a través de envíos a domicilio, “eso fue muy duro porque no representan más que el 30% de los ingresos de un negocio, en nuestro caso gracias a Dios ya veníamos haciendo ventas bajo esta modalidad y por eso teníamos más aceitado el sistema”.
Somos una empresa salteña para los salteños
Cuenta que tienen muchos empleados divididos en las tres sucursales pero con las puertas cerradas y decididos a cuidar cada puesto de trabajo decidieron reorganizarse para poder seguir. “Al principio hicimos una especie de cooperativa y los ingresos los dividíamos entre todos en partes iguales para pagar los sueldos y ese fue el modo que encontramos para subsistir durante toda la cuarentena”.
Ahora que están autorizados a reabrir nuestras puertas solo lo hicieron con dos sucursales, “aún no logramos abrir el local más antiguo donde cumplimos 50 años porque el espacio no nos da para cumplir con todos los protocolos y no sería rentable, entonces nuestro personal está dividido en los otros dos locales”.
Si bien reconoce que los preocupa el aumento de casos de coronavirus y están atentos a la ocupación de camas, están concentrados en que los protocolos se cumplan a rajatabla para poder seguir trabajando.
Se trata de una de las empresas que forman parte de la Cámara Pyme de Salta y que con gran esfuerzo lograron salir adelante.
¿Cómo nació el negocio?
Consultado sobre los inicios de un negocio familiar que hoy es reconocido ampliamente, Dante contó que fue una idea de su padre, quien es oriundo de Tucumán.
El primer local fue instalado en el Mercado San Miguel y “como le iba bien decidió ampliarse y puso su primer local en la Vicente López y Leguizamón”. La elección del nombre fue una recomendación de su abuelo, “al que ahora le dicen el gigante del norte, que es la cancha de Gimnasia le llamaban Monumental de Salta, mi abuelo le sugirió a mi papá ponerle ese nombre y así quedó”.
En un primer momento era una pizzería y rotisería, luego se incorporó la parrilla que hoy es uno de sus clásicos más consumidos. “Somos cuatro hermanos y a medida que fuimos creciendo comenzamos a involucrarnos con el negocio y lo hicimos crecer”.
Dante reconoció que siempre han trabajado con el público salteño por lo que no se vieron demasiado afectados por la falta de turistas. “Estamos agradecidos porque tras la apertura nuestros clientes volvieron a visitarnos”.
